La decisión de las víctimas de violencia doméstica de acudir a la Justicia para denunciar a sus victimarios no es algo sencillo. Esto queda más que demostrado en las últimas estadísticas publicadas por el Centro de Estudios y Proyectos Judiciales, del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
Según la investigación, sólo en el siete por ciento de las denuncias recibidas por violencia familiar, el acto presentado ante las autoridades corresponde al primer episodio. En efecto, en el 90 por ciento de los casos han existido actos previos que nunca fueron objeto de denuncia.
El informe se elaboró a partir de los datos registrados en el Formulario Especial de Denuncia en los diferentes organismos del Poder Judicial en Córdoba. La gran mayoría de 625 casos analizados se registró en Capital. El período analizado se encuentra comprendido entre el 3 de septiembre y el 31 de diciembre del año pasado.
Todos los días. Respecto de la repetición de los episodios, en cuatro de cada 10 casos denunciados se trata de violencia que tiene una frecuencia diaria; un 24 por ciento son casos semanales; y un 10 por ciento de repetición mensual o quincenal. Sólo un cuarto de las denuncias responde a hechos esporádicos.
Otra de las aristas interesantes que aporta el informe de la Justicia provincial, es que en casi la mitad de los casos la víctima dice que el familiar que ha ejercido violencia consume habitualmente drogas o alcohol. Esto ocurre, según el TSJ, en el 49 por ciento de los hechos. Además, en uno de cada cuatro episodios, “el denunciado se encontraba drogado al momento del hecho”, según la investigación.
pega parejo. Respecto de la relación entre denunciante y denunciado, en el 69 por ciento de los casos se trata de la pareja, ex pareja, cónyuge, concubino o novio. El resto se distribuye de manera equilibrada entre padres e hijos, hermanos u otros parientes.
Qué tipo de violencia. En el 90 por ciento de las denuncias recibidas en los organismos judiciales, hay actos de violencia verbal, psicológica o emocional. A su vez, en el 43 por ciento de las denuncias, se llega al nivel de violencia física. También hay un 6 por ciento de violencia patrimonial y un 6 por ciento de violencia sexual.
En el caso de las consecuencias de las agresiones, la investigación puntualiza que el 39 por ciento de las víctimas sufrió algún tipo de lesión física.
Además, un dato preocupante: el 9 por ciento de las mujeres estaban, en el momento de sufrir los hechos de violencia, embarazada. Otro detalle: en el 31 por ciento de las denuncias, la víctima afirmó haber recibido amenazas previas.
