Megaoperativo de la Afip en busca de millonaria "evasión" en empresas cerealeras
Estos operativos se realizaron a pedido de la Justicia, en una causa por presunta evasión por alrededor de 310 millones de pesos en operaciones de compraventa de granos en negro, a través de una presunta "asociación ilícita fiscal".
“Se ha iniciado una gran investigación para poner en manos de la Justicia cómo operaba una organización que se dedica a la comercialización de granos en el mercado marginal”, señaló Graciela Moronella, jefa del operativo.
Aseguró que utilizan facturación apócrifa y empresas fantasmas y que la deuda en que habrían incurrido superaría los 310 millones de pesos.
La causa está en manos del Juzgado Federal Nº 1 de San Isidro.
La Justicia libró 165 órdenes de allanamiento que habilitaron el mega procedimiento.
Los allanamientos en esas compañías se realizaron por orden del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N 1 – Secretaria 3 de San Isidro.
En las maniobras investigadas se habrían evadido alrededor de 310 millones de pesos en operaciones de compraventa en negro de los principales cereales y oleaginosas.
Los procedimientos se realizaron principalmente en Capital Federal y el Gran Buenos Aires (77 casos) y en las provincias de Santa Fe (39) y Córdoba (30).
Se inspeccionaron también cinco domicilios en Tucumán; cuatro en la provincia de Buenos Aires; dos, respectivamente, en Santiago del Estero, San Luis y Mendoza; y uno en Entre Ríos, Catamarca y Chubut.
La AFIP precisó que se encuentran involucradas en las maniobras unas 200 personas físicas o jurídicas, entre las que se destacan empresas mixtas, empresas fantasmas, grandes cerealeras, bolseros, escribanos, contadores y testaferros.
El caso de evasión es el segundo descubierto en este mes, luego de la asociación ilícita tributaria detectado en la ciudad bonaerense de Necochea, destinada a sortear el pago de impuestos en la comercialización de soja y maíz, que dio lugar a una denuncia penal del organismo y a la detención de cinco personas.
En ambos casos una extensa red económica de productores operaba sin exteriorizar sus ventas al fisco y evadía así el pago de los tributos correspondientes.
Los agricultores involucrados vendían en negro sus granos a distintas empresas intermediarias constituidas por las asociaciones ilícitas investigadas, las cuales atribuían las compras realizadas a diversos proveedores apócrifos.
Tales asociaciones compraban los granos sin registrar a los agricultores y lo blanquean incorporando la mercadería tanto al movimiento físico como al circuito financiero, para luego colocarla en el mercado, generalmente vendiéndola a exportadoras de gran relevancia.